La potencia eléctrica es el ritmo o tiempo en el que la energía eléctrica es trasladada de un punto a otro a través de un circuito eléctrico. Dicho de otro modo, es la cantidad de energía que utiliza un aparato o elemento en un determinado momento.
La potencia eléctrica es un concepto utilizado para indicar la cantidad de energía eléctrica que se traspasa desde una fuente generadora hasta un punto de consumo. En lo que respecta a los hogares, la potencia eléctrica determina la cantidad de aparatos eléctricos que podemos conectar al mismo tiempo a la red eléctrica.
Por ello, es de vital importancia calcular cuál puede llegar a ser la potencia eléctrica a necesitar en una empresa u hogar para poder establecer la cantidad energética a contratar y el número de aparatos a conectar de manera simultánea.
Calcular la potencia eléctrica es posible si se tiene en cuenta la tensión eléctrica, es decir, la presión de una determinada fuente energética en un circuito. Para ello, es importante tener en cuenta el consumo de cada aparato, el número de electrodomésticos o elementos que van a ser conectados al mismo tiempo, las dimensiones del inmueble y el número de personas dentro. Además, es necesario conocer si se cuenta con una instalación monofásica o trifásica.
Es necesario tener en cuenta que el valor máximo de la potencia eléctrica es 1, dato que se obtendrá cuando todos los aparatos eléctricos estén conectados a la vez. Por ello, normalmente 0,25 es el valor que se obtiene con un uso bajo de los electrodomésticos y 0,50 cuando se está haciendo un uso relativamente intensivo.
La potencia contratada es la máxima potencia eléctrica que se puede consumir en un momento determinado. Para calcularla, es necesario tener en cuenta el número de aparatos que pueden ser conectados al mismo punto de suministro simultáneamente. El valor obtenido se expresa, normalmente, en kilovatios (kW).
Además, la potencia contratada suele formar parte y estar claramente marcada en las facturas de la luz correspondientes a cada mes. Es importante saber que la potencia contratada no debe sobrepasar la potencia máxima permitida por la instalación eléctrica realizada.
