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Tarifas de luz

Una tarifa de luz es el precio que se ha de pagar por el consumo correspondiente de electricidad.

Significado de tarifas de luz

Las tarifas de luz son los precios que debemos pagar dependiendo de la electricidad que consumamos. El precio final es fijado con base en una facturación básica y una serie de recargos o descuentos que son sumados o restados a dicho precio base.

El precio de la tarifa de la luz se complementa con los importes correspondientes a impuestos y alquiler de equipo necesario para poder disfrutar de electricidad en casa. 

Facturación básica

El precio de la facturación básica está fijado con base en dos conceptos principales: término de potencia y energía. 

  • Término de potencia: el precio fijado dependerá de la potencia contratada, es decir, del grado de electrificación del hogar. La cifra fija al mes a pagar se obtiene al multiplicar el precio de cada kW por el número de kW contratados. 
  • Término de energía: se trata de una cifra variable que aumenta o disminuye según la cantidad de energía que se consuma. Se mide en kWh y se calcula multiplicando el precio unitario por el número de kWh que se consuman.

Complementos tarifarios

Los complementos tarifarios aplicarán descuentos o recargos en la tarifa eléctrica básica. Hoy en día existen diferentes complementos tarifarios:

  • Discriminación horaria: la demanda energética se suele concentrar en franjas horarias diurnas, conocidas también como horas punta. Al contrario, es durante la noche donde se encuentran las franjas horarias en las que el consumo es menor. Estas diferencias de consumo y demanda energética son tenidas en cuenta a la hora de establecer el precio final de la electricidad. Por ello, la hora en la que se haga uso de la electricidad supone un complemento tarifario a la tarifa de la luz básica. 
  • Estacionalidad: el mes del año en el que se realiza el consumo de energía también puede influenciar en el precio final de la factura de la luz. De este modo, si el consumo efectuado se realiza en los meses de mayo, junio, agosto o septiembre, puede que la tarifa de la luz se beneficie de un pequeño descuento; durante los meses de enero, febrero, noviembre y diciembre, la tarifa de la luz puede ser algo más cara debido a la alta demanda energética. 
  • Energía reactiva: se trata de unos costes y descuentos porcentuales que pueden aplicarse según el factor de potencia de la instalación. No es aplicable a las tarifas domésticas. 
  • Interrumpibilidad: las grandes tarifas de alta tensión pueden verse beneficiadas de descuentos si se comprometen a reducir su demanda y no sobrepasar la potencia preestablecida durante al menos 5 años.
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