Consumo, en lo que respecta a la electricidad, es la cantidad de energía utilizada y demandada en un determinado tiempo y a un punto concreto de suministro.
Por lo tanto, el consumo eléctrico es, en consecuencia, la cantidad de energía que se consume en un determinado tiempo o plazo que se conoce como periodo de facturación. El consumo eléctrico se mide en kWh, es decir, en kilovatios hora. Estos valores corresponden y son el conjunto de varios factores que influyen en la cantidad de consumo eléctrico demandado: es necesario tener en cuenta las dimensiones de la instalación, el uso que se hace de dicha energía, el lugar o la zona donde se encuentre dicha instalación eléctrica y los hábitos de consumo.
El consumo eléctrico se mide en kWh, es decir, en kilovatios hora. Esto quiere decir que durante una hora se consumen 1 kilovatios, o lo que es lo mismo, 1000 vatios. Por lo tanto, el kWh es la medida universal que se utiliza para medir el consumo eléctrico tanto en viviendas como en negocios.
El consumo eléctrico será mayor o menor dependiendo de la cantidad de energía utilizada durante un periodo de tiempo concreto y de diferentes factores que ya hemos mencionado con anterioridad: tipo de actividad realizada, rendimiento energético del edificio, tecnología utilizada, hábitos de consumo… En la actualidad existen diferentes métodos y avanzados dispositivos con los que poder medir fácilmente el consumo eléctrico de un lugar. Además, es posible conocer tu consumo eléctrico en las diferentes facturas mensuales recibidas.
Si estás interesado en saber cómo poder reducir tu consumo eléctrico y, como consecuencia, pagar menos en tu factura mensual, puedes seguir los siguientes consejos para reducir dicho consumo: