Las centrales hidroeléctricas son un elemento importantísimo a la hora de garantizar un suministro estable de electricidad para la población. Además, gran parte de su importancia radica en que beben de una fuente de energía renovable como la fuerza que genera el agua al moverse, lo que significa que es una forma sostenible de generar electricidad que no produce emisiones de gases de efecto invernadero.
Ahora bien, ¿Qué es una central hidroeléctrica y cómo funciona? En las siguientes líneas profundizamos en un concepto cada vez más importante en nuestro día a día.
Una central hidroeléctrica es una instalación que utiliza la energía hidráulica para generar energía eléctrica renovable. Estas centrales aprovechan la energía potencial gravitatoria del agua en movimiento que circula por los ríos.
Este tipo de instalación ofrece una fuente de energía 100% renovable, sin emisiones contaminantes, y es capaz de adaptarse a la demanda en tiempo real, asegurando el suministro eléctrico con alta fiabilidad.
El funcionamiento de una central hidroeléctrica puede resumirse en tres pasos:
Las centrales hidroeléctricas pueden funcionar a todas horas, 24/7, y la cantidad de electricidad producida es proporcional al caudal de agua y la altura del salto, lo que les proporciona una alta eficiencia y capacidad de respuesta ante la demanda eléctrica.
Existen tres tipos de centrales hidroeléctricas según su potencia instalada:
Cada tipo de central hidroeléctrica ofrece ventajas específicas en función de sus características, su demanda energética y de la zona geográfica en la que se ubican.